Cuando te has criado en un pueblo minúsculo que nadie conoce siempre es un subidón encontrarte a alguien de la misma provincia, y no digamos si conoces,en un lugar inesperado, a alguien de un pueblo cercano.
Cuando estuve en Venezuela el guia me dijo que el otro chaval que viajaba en solitario y se iba a unir a nuestra excursión por el delta del Orinoco también venía de Guadalajara y yo pensé que se estaría confundiendo con la Guadalajara de México. Pero no, coincidímos con un chaval de Molina de Aragón, que además conocía a los hermanos de la amiga con la que viajaba (es lo bueno de los sitios pequeños, nos conocemos todos). Imaginaos, pasamos unas horas juntos y parecía que eramos amigos de toda la vida. Amigos fugaces, porque no hemos vueto a hablar, la camadarería se queda en el viaje.
Por eso, cuando mi novio, Alex, el señorito "del barrio de Chamartín de toda la vida" me confesó que había crecido unos años en Trillo aluciné. Trillo está bien cerca de mi pueblo, así que, aprovechando que pasabamos un fin de semana en mi pueblo, nos acercamos a visitarlo.
Dimos una pequeña vuelta y hasta encontramos la casa donde vivió (ojo, se fué de alli con 4 años y se acordaba!). Yo creo que fue muy emocionante y, además, lo pasamos bien, que Trillo tiene algunos rincones bien bonitos.
Además, hemos visitado una hamburguesería que yo no conocía: Home Burguer. Me gustó mucho, es de esas hamburgueserias que tienen mezclas chulas que me encanta probar, como esta hamburguesa con queso Philadelphia, cebolla asada y nueces. Además, nos trataron genial y ofertan alternativas para vegetarianos y productos ecológicos, eso sí, les dejé una sugerencia: que sirvan jarras de agua del grifo ( un dia haré una entrada sobre eso).
Pero no creais que comemos fuera siempre. Ahora que a Alex le ha picado el gusanillo de la cocina no para de buscar recetas en internet. Una de las últimas, estas berenjenas rellenas de champiñones y carne picada. Nos llevaron tiempo, pero quedaron divinas
Cuando estuve en Venezuela el guia me dijo que el otro chaval que viajaba en solitario y se iba a unir a nuestra excursión por el delta del Orinoco también venía de Guadalajara y yo pensé que se estaría confundiendo con la Guadalajara de México. Pero no, coincidímos con un chaval de Molina de Aragón, que además conocía a los hermanos de la amiga con la que viajaba (es lo bueno de los sitios pequeños, nos conocemos todos). Imaginaos, pasamos unas horas juntos y parecía que eramos amigos de toda la vida. Amigos fugaces, porque no hemos vueto a hablar, la camadarería se queda en el viaje.
Por eso, cuando mi novio, Alex, el señorito "del barrio de Chamartín de toda la vida" me confesó que había crecido unos años en Trillo aluciné. Trillo está bien cerca de mi pueblo, así que, aprovechando que pasabamos un fin de semana en mi pueblo, nos acercamos a visitarlo.
Dimos una pequeña vuelta y hasta encontramos la casa donde vivió (ojo, se fué de alli con 4 años y se acordaba!). Yo creo que fue muy emocionante y, además, lo pasamos bien, que Trillo tiene algunos rincones bien bonitos.
Además, hemos visitado una hamburguesería que yo no conocía: Home Burguer. Me gustó mucho, es de esas hamburgueserias que tienen mezclas chulas que me encanta probar, como esta hamburguesa con queso Philadelphia, cebolla asada y nueces. Además, nos trataron genial y ofertan alternativas para vegetarianos y productos ecológicos, eso sí, les dejé una sugerencia: que sirvan jarras de agua del grifo ( un dia haré una entrada sobre eso).
Pero no creais que comemos fuera siempre. Ahora que a Alex le ha picado el gusanillo de la cocina no para de buscar recetas en internet. Una de las últimas, estas berenjenas rellenas de champiñones y carne picada. Nos llevaron tiempo, pero quedaron divinas
1 comentario:
Que maravilla, y no conozco esos lugares!
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